Tragedia en la Patagonia: Tormenta mortal cobra la vida de dos mexicanos en Torres del Paine

Dos excursionistas de nacionalidad mexicana perdieron la vida y otras siete personas se encuentran desaparecidas tras ser sorprendidos por una tormenta de nieve en el Parque Nacional Torres del Paine, en la Patagonia chilena. El incidente desató un complejo operativo de rescate, obstaculizado por las severas condiciones climáticas.

Una súbita tormenta de nieve con ráfagas de viento que superaron los 190 km/h sorprendió a un grupo de excursionistas el lunes por la tarde en el Parque Nacional Torres del Paine, en la Región de Magallanes, Chile, resultando en la muerte de dos ciudadanos mexicanos y la desaparición de otras siete personas. Las víctimas fatales, un hombre y una mujer, realizaban el exigente circuito de trekking conocido como la “O”, cerca del Paso John Gardner. Según informaron las autoridades, el hombre fue encontrado sin vida dentro del parque el mismo lunes, mientras que la mujer fue rescatada con hipotermia pero falleció mientras era trasladada al Campamento Perros.

Además de los fallecidos, se reportó que siete personas continúan con paradero desconocido, mientras que un excursionista logró ser evacuado tras contactar a los servicios de emergencia. En respuesta a la emergencia, se ha desplegado un importante operativo de búsqueda y rescate en el que participan personal de Carabineros, el Ejército y la Corporación Nacional Forestal (CONAF). Sin embargo, las labores avanzan con lentitud debido a las condiciones meteorológicas adversas que persisten en la zona.

Como medida de seguridad y para facilitar las operaciones, la CONAF dispuso el cierre temporal de algunos sectores del parque, incluyendo el tramo entre el Campamento Coirón y Grey. El Parque Nacional Torres del Paine es uno de los destinos turísticos más importantes de Chile, conocido por su belleza natural y sus desafiantes rutas.

No obstante, el clima en la región es notoriamente volátil, con cambios bruscos que pueden incluir nevadas y vientos helados, elevando el riesgo para los senderistas. Un testigo que se encontraba en el lugar describió un rápido deterioro de las condiciones, con vientos continuos de más de 100 km/h y granizo, lo que subraya la peligrosidad del entorno.