3I/ATLAS: El cometa interestelar que desata un debate cósmico entre la ciencia y la especulación

El paso del cometa interestelar 3I/ATLAS por nuestro sistema solar ha encendido un intenso debate público y científico sobre su naturaleza, alimentado por sus características anómalas y la especulación sobre un posible origen artificial.

El cometa 3I/ATLAS, el tercer objeto interestelar conocido en visitar nuestro sistema solar, ha capturado la atención de figuras públicas como Kim Kardashian, Joe Rogan y Elon Musk, generando una ola de interés y teorías sobre su origen. A pesar de la especulación, la NASA ha comunicado que se trata de un cometa y no de una nave extraterrestre, asegurando que no representa ninguna amenaza para la Tierra. Su punto más cercano al planeta será el 19 de diciembre, a una distancia segura de entre 270 y 273.6 millones de kilómetros.

La controversia se centra en las características inusuales del cometa, que han dado pie a un debate científico. El Dr. Avi Loeb de la Universidad de Harvard ha planteado la posibilidad de que sea un objeto artificial, estimando una probabilidad de entre el 30% y 40%, aunque admite que es una impresión y no un cálculo. Su argumento se basa en anomalías como la falta de una cola visible, una composición química con altos niveles de dióxido de carbono y níquel, y una trayectoria que no se explica únicamente por la gravedad del Sol. Otros astrónomos, como David Jewitt de la UCLA, sostienen que estas propiedades, aunque extrañas, pueden explicarse como fenómenos naturales de un objeto formado en otro sistema estelar.

Una legisladora estadounidense, Ana Paulina Luna, afirmó que la NASA le confirmó haber notado la "cola anómala" descrita por Loeb. El protocolo de Defensa Planetaria de la NASA se activó parcialmente para estudiar el objeto y mejorar los modelos de predicción, no por una amenaza inminente. Se esperan más observaciones de los telescopios James Webb y Hubble para recabar datos adicionales.

Paralelamente, se descubrió otro objeto, C/2025 V1 (Borisov), catalogado como "casi interestelar" y que también carece de una cola clara. Elon Musk comentó que si 3I/ATLAS estuviera hecho de níquel, sería una "nave espacial muy pesada" capaz de destruir un continente. Aunque un artículo menciona la detección de una primera señal de radio que "aclara el misterio", no se proporcionan más detalles sobre su significado. Mientras tanto, 3I/ATLAS continúa su viaje fuera de nuestro sistema solar, dejando tras de sí un debate que combina la fascinación por la vida extraterrestre con el riguroso escrutinio científico.