Doble Cara de la Guerra: Bombardeos Rusos Mortales Eclipsan Esfuerzos de Paz de Ucrania

Un devastador bombardeo ruso en el oeste de Ucrania dejó decenas de víctimas civiles, en una cruda muestra de la intensificación del conflicto mientras el presidente Volodymyr Zelensky busca reactivar las conversaciones de paz en Turquía.

Rusia lanzó una ofensiva a gran escala contra Ucrania durante la madrugada del miércoles, utilizando 476 drones y 48 misiles de diversos tipos. Según la Fuerza Aérea ucraniana, sus sistemas de defensa lograron interceptar la mayoría de los proyectiles, derribando 442 drones y 41 misiles. A pesar de esto, el ataque causó daños significativos en al menos una decena de regiones del país, como parte de una campaña cada vez más intensa contra la infraestructura energética ucraniana. El bombardeo más mortífero tuvo lugar en la ciudad de Ternópil, en el oeste de Ucrania, donde los proyectiles impactaron dos bloques de viviendas. El Ministerio del Interior informó un saldo de al menos 25 personas fallecidas, entre ellas tres niños, y 73 heridos.

Las imágenes difundidas por las autoridades mostraron edificios destruidos, incendios y calles cubiertas de escombros. Adicionalmente, los incendios provocaron que el nivel de cloro en el aire se multiplicara por seis, llevando a las autoridades locales a pedir a los residentes que permanecieran en sus casas con las ventanas cerradas.

La campaña rusa también afectó otras áreas.

En la región nororiental de Járkov, se reportaron 46 heridos y daños en infraestructuras energéticas y de transporte. Asimismo, se registraron ataques contra instalaciones energéticas en las regiones occidentales de Ivano-Frankivsk, donde tres personas resultaron heridas, y Leópolis.

Estos ataques a objetivos civiles y energéticos se producen a medida que se acerca el invierno.

Esta agresión coincide con los esfuerzos diplomáticos del presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, quien se encontraba de visita en Ankara, Turquía, con el objetivo de "revitalizar" las conversaciones de paz y reactivar la participación de Estados Unidos. Tras el ataque, Zelensky declaró que "cada ataque descarado contra la ciudadanía demuestra que la presión sobre Rusia es insuficiente", e instó a sus aliados occidentales a imponer más sanciones y proporcionar ayuda adicional para la defensa de Ucrania.