Donald Trump ataca al director Rob Reiner tras su asesinato



El aclamado director de cine, actor y activista Rob Reiner, de 78 años, y su esposa, la fotógrafa Michele Singer Reiner, fueron encontrados muertos el domingo en su domicilio de Los Ángeles. Las autoridades investigan el suceso como un aparente homicidio y, según informes de prensa, uno de sus hijos, Nick Reiner, ha sido detenido como principal sospechoso.
La noticia ha generado una profunda conmoción en la industria del entretenimiento y en la esfera política.
En lugar de ofrecer condolencias, el presidente Donald Trump utilizó su red social Truth Social para atacar al cineasta fallecido, quien era un conocido crítico de su gobierno. Trump sugirió que las muertes fueron el resultado de la "furibunda obsesión" de Reiner en su contra, atribuyendo el crimen a "la ira que provocó en otros por su enorme, obstinada e incurable aflicción con una enfermedad mentalmente paralizante conocida como el Síndrome de Trastorno por Trump". El mensaje del mandatario desató una ola de indignación, incluso entre miembros del Partido Republicano como Thomas Massie y Marjorie Taylor Greene, quienes calificaron sus palabras de inapropiadas e irrespetuosas.
Rob Reiner fue una figura influyente en Hollywood durante décadas.
Saltó a la fama en los años 70 como actor en la comedia "All in the Family", por la que ganó dos premios Emmy. Posteriormente, se consolidó como un director versátil con películas icónicas como "This Is Spinal Tap", "Cuenta conmigo", "La princesa prometida", "Cuando Harry conoció a Sally" y "Cuestión de honor", que recibió una nominación al Oscar a la mejor película. Hijo del legendario comediante Carl Reiner, continuó actuando a lo largo de su carrera en producciones como "El lobo de Wall Street" y la serie "New Girl". Además de su carrera cinematográfica, Reiner fue un demócrata devoto y un activista comprometido con causas liberales, como el matrimonio igualitario y la financiación de programas de educación infantil en California. En los últimos años, se convirtió en una de las voces más críticas contra la administración Trump, a quien llegó a calificar como una amenaza para la democracia.















