Redadas y Retórica: La Ofensiva de Trump Contra la Comunidad Somalí en EE. UU.

El gobierno de Estados Unidos prepara redadas migratorias enfocadas en la comunidad somalí de Minnesota, en medio de una escalada retórica del presidente Donald Trump contra los inmigrantes de esa nación africana.

Las autoridades federales planean un operativo de inmigración en el área de Minneapolis–St. Paul, Minnesota, que se centrará principalmente en inmigrantes somalíes con órdenes definitivas de deportación.

La operación, descrita como una redada dirigida y de alta prioridad, podría incluir arrestos incidentales de otras personas sin estatus legal. Una portavoz de Seguridad Nacional, Tricia McLaughlin, declaró que el objetivo de las redadas no es la raza o etnia, sino el estatus migratorio ilegal, y se negó a comentar sobre operaciones futuras. Esta medida se produce en un contexto de intensificación de la retórica del presidente Donald Trump, quien afirmó que los inmigrantes somalíes “no contribuyen en nada” y que no los quiere en el país. En una reunión de gabinete, calificó a Somalia como un país que “apesta” y a los inmigrantes como “basura”, además de atacar personalmente a la congresista demócrata por Minnesota, Ilhan Omar, de origen somalí. Los comentarios de Trump se vinculan a un escándalo de fraude en Minnesota, donde se investiga el desvío de más de mil millones de dólares de servicios sociales por parte de estadounidenses de origen somalí. Previamente, el presidente había cancelado el Estatus de Protección Temporal (TPS) para los migrantes somalíes.

Las declaraciones y acciones del gobierno han generado una fuerte reacción en Minnesota, hogar de la comunidad somalí más grande de EE. UU., con aproximadamente 84,000 residentes de un total de 260,000 a nivel nacional en 2024. El alcalde de Minneapolis, Jacob Frey, prometió que la policía de la ciudad no colaborará con los agentes federales, defendiendo las contribuciones de la comunidad somalí y advirtiendo que señalar a este grupo violará el debido proceso y podría llevar a la detención de ciudadanos estadounidenses.

Por su parte, el gobernador Tim Walz criticó a Trump por “satanizar a toda una población”.

Líderes comunitarios han calificado la situación como un ataque político.

Jaylani Hussein, del Consejo de Relaciones Islámico-Estadounidenses, señaló que alrededor del 95% de los somalíes en Minnesota son ciudadanos estadounidenses y que estas acciones buscan presionar a la comunidad inmigrante en general. El concejal de Minneapolis, Jamal Osman, aseguró que la ciudad defenderá a sus inmigrantes y no permitirá que sean divididos.