
El cierre de los canales musicales de MTV simboliza un cambio generacional en el consumo de medios, donde el streaming ha desplazado a la televisión lineal. La decisión, impulsada por una reestructuración corporativa de Paramount, marca el final de un formato que fue un pilar de la cultura pop durante más de cuatro décadas, aunque la marca MTV persistirá a través de su canal principal enfocado en realities y sus plataformas digitales.













