
El mercado de criptomonedas sufrió una fuerte caída impulsada por una liquidación masiva de posiciones largas, lo que refleja un exceso de confianza de los inversores. La decisión de la Reserva Federal de recortar las tasas de interés fue un catalizador clave, generando incertidumbre y llevando a los operadores a reevaluar su exposición al riesgo.