
El lanzamiento del chip M5 y su integración en el MacBook Pro, iPad Pro y Vision Pro subraya la estrategia de Apple de potenciar su ecosistema con hardware optimizado para la inteligencia artificial local y el rendimiento gráfico.
Aunque los diseños exteriores son continuistas, la renovación interna es profunda, prometiendo mayor eficiencia y capacidad para tareas profesionales, al tiempo que se realizan ajustes estratégicos en precios y accesorios.










