Noticias cortas: Bolsa nacional e internacional

La amenaza de aranceles del 100% por parte de Trump representa una escalada sin precedentes en la guerra comercial, provocando una aversión al riesgo generalizada que afectó negativamente a los mercados de acciones, divisas y materias primas a nivel global.

La abrupta caída de Wall Street evidencia la alta sensibilidad del mercado a las tensiones geopolíticas y comerciales, con el sector tecnológico mostrando una particular vulnerabilidad y renovando los temores sobre una posible corrección en un entorno de incertidumbre económica.

La moneda mexicana resintió fuertemente la tensión comercial global, superando el umbral psicológico de los 19 pesos por dólar en bancos, debido tanto a la fortaleza del dólar como a la debilidad de otras monedas emergentes, reflejando su vulnerabilidad a choques externos.

El temor a una menor demanda global por la guerra comercial entre Estados Unidos y China, junto con una menor tensión geopolítica en Medio Oriente, provocó un desplome en los precios del petróleo, llevándolos a su nivel más bajo en cinco meses.

El oro reafirmó su estatus como activo de refugio por excelencia al superar los 4,000 dólares por onza, canalizando el capital de inversionistas que huyen de la volatilidad de los mercados de acciones provocada por las tensiones comerciales y la incertidumbre política.

La BMV resintió el impacto de la aversión global al riesgo, ligando dos semanas a la baja y con caídas importantes en sectores clave, lo que demuestra su vulnerabilidad ante la incertidumbre generada por la guerra comercial entre Estados Unidos y China.

La decisión de China de restringir la exportación de tierras raras representa una escalada estratégica en la guerra comercial, utilizando su dominio en materiales críticos como una palanca de negociación que provocó una dura represalia por parte de Estados Unidos.

La reciente volatilidad y las valoraciones exorbitantes en el sector tecnológico han intensificado el temor en Wall Street a una burbuja especulativa, con advertencias de que un posible estallido tendría consecuencias más graves que la crisis de las puntocom debido al mayor peso del sector en los índices bursátiles.

La aversión al riesgo desatada por las tensiones comerciales provocó una fuerte demanda de bonos del Tesoro de EE. UU., haciendo caer sus rendimientos y reflejando la búsqueda de seguridad de los inversionistas ante un panorama económico global y local cada vez más incierto.

Grupo México registró una de las mayores caídas semanales en la BMV, reflejando una combinación de factores corporativos, como el fallido intento de compra de Banamex, y el nerviosismo generalizado del mercado que penalizó a los activos de riesgo.