
El mercado estadounidense mostró un fuerte dinamismo en los sectores tecnológico y de inteligencia artificial, llevando al S&P 500 y al Nasdaq a cifras récord.
Este avance se fundamentó en datos macroeconómicos que sugieren una desaceleración de la inflación, lo que a su vez alimenta las expectativas de que la Reserva Federal recortará las tasas de interés en su próxima reunión. El desempeño de Oracle fue particularmente notable, mientras que la caída del Dow Jones y de Apple indica una selectividad en el optimismo de los inversionistas.