
Se proyecta un aumento del 11% al salario mínimo para 2026, alcanzando aproximadamente 309.50 pesos diarios, como parte de la estrategia gubernamental de recuperación del poder adquisitivo.
Si bien el gobierno defiende que esta política ha reducido la pobreza sin generar inflación, analistas financieros alertan sobre posibles efectos negativos en el empleo y los precios, especialmente para las pymes.











