
La reforma a la Ley de Amparo fue aprobada en la Cámara de Diputados con un controvertido artículo transitorio que, según la oposición, introduce una retroactividad parcial, a pesar de las negativas del oficialismo. El dictamen modificado regresa al Senado para su análisis y votación final, manteniendo en vilo el equilibrio entre la agilidad procesal y la protección de los derechos adquiridos.













